15 diciembre, 2010

Nueva

Y yo pensaba que se me acababan las palabras
Que no encontraría esquinas para cambiar el rumbo
Cuando vi de frente aquella luz hecha de tu sonrisa clara
Que llenó el vacío de mi oscuro y lejano mundo.

Por calles similares caminé en otras noches
Pero ahora son tus ojos los que navegan estas olas
Brillando desde el cielo como constelaciones de diamantes
Como joyas eternas, como tu mirada nerviosa.

Me robas la simpleza del calor que experimento
Pones en estas líneas un soplo de poesía nueva
Llenas los espacios donde ayer no había rima
Y ahora todo tiene un ritmo, una melodía y una nueva belleza.